Vida Silvestre: El Koala

El Koala

El koala denominado científicamente Phascolarctos cinereus es una especie de marsupial diprotodonto de la familia Phascolarctidae, arborícola con hábitos de baja actividad, similares a los de un perezoso.

Características

El Koala puede llegar a medir 76 cm, su cuerpo se encuentra cubierto de un pelaje de color gris, su cabeza es grande y redonda, al igual que sus orejas. Posee una dentadura adaptada para la alimentación herbívora. Las extremidades son cortas poseen cinco dedos, en cuyos dedos posee una garra fuerte para sujetarse.

Las hembras pueden llegar a vivir hasta 15 años, sin embargo los machos poseen una media de 10 años, ambos en estado salvaje; los machos se pueden distinguir de las hembras por su bolsa testicular y la glándula que poseen en el pecho el cual produce un olor peculiar y son más grandes que las hembras.

Los Koalas son animales nocturnos, es decir, que sus actividades las realizan en este horario, duermen 20 horas más que la pereza. Sus depredadores naturales son los dingos, las lechuzas, las águilas, los varanos y las serpientes pitón. Las épocas de sequía y los incendios, también pueden resultar peligrosos para ellos. Pasan el mayor tiempo encima de los árboles de eucalipto los cuales les aportan la mayor cantidad de azúcares, almidón, grasas y proteínas necesarios para su supervivencia.

Territorio

Los Koalas son animales solitarios, pero poseen un sistema de comunicación, al igual que el de organización muy complejo; poseen un territorio propio el cual es defendido por el líder de la manada y se organiza dependiendo de diversos factores como son: sexo, edad, posición social, calidad y resistencia del terreno. Marcan su territorio mediante el olor de sus glándulas mamarias y los machos lo realizan mediante la orina.

En cuanto a la comunicación ambos géneros gritan al sentir temor; cuando el macho requiere hacerse sentir emite un ronquido lo que les permite demostrar su posición social y de esta manera evitar perder energía en peleas. Las hembras por su parte emiten un chillido que lo utilizan para intimidar a sus crías y cuando se encuentran enfadadas.

Los Koalas jóvenes pueden permanecer junto a sus madres por un lapso de 18 meses, después de transcurrido tal tiempo deben emigrar a otras zonas a ubicar la que les proporcione la seguridad, por tal motivo deben recorrer a veces grandes extensiones de tierra para posicionarse de alguna, pero si un Koala muere su territorio puede ser heredado por uno de sus congéneres.

Enfermedades

Los Koalas no poseen un sistema inmune que les permita defenderse contra las enfermedades respiratorias, digestivas y urogenitales, úlceras de estómago, cánceres, deshidratación y atrofia muscular. Asimismo, tienen una gran tendencia a padecer de estrés que, sumado a su gran actividad en la época de apareamiento, provoca que sean más vulnerables a enfermedades en ese período. Además, suelen sufrir infecciones de clamidia. Cuando llueve, a los koalas enfermos se les queda el pelaje húmedo. También las garrapatas se les pegan con gran facilidad. Por si fuera poco, los koalas más viejos pueden llegar a morir de hambre por el desgaste de sus dientes, ya que no son capaces de seguir masticando las hojas.